Cambiar muebles y decoración y mejorar la eficiencia energética de un inmueble son algunas de las pequeñas reformas que se pueden hacer para sacarle más partido. Sobre todo si quieres atraer a diferentes tipos de inversores o compradores y formalizar cuanto antes su venta. 
 
Dicen las lenguas populares que siete segundos son suficientes para que una persona decida comprar una vivienda o no. Por tanto, en el mercado inmobiliario, como en otros muchos, la primera impresión es decisiva. Y es que, además de aspectos que no puedes controlar como la ubicación o la orientación de una casa, existen otros que sí puedes mejorar para que un posible comprador se enamore en tiempo récord. 
 
Si tienes en mente vender un inmueble y quieres aumentar su precio final, es importante revisar qué mejoras necesita. Es decir, se trata de revalorizar tu piso o casa; o dicho de otra manera, de incrementar su valor de tasación.

Así que, antes de ponerla en venta, actualiza tu vivienda. Uno de los primeros pasos debe ser adecuar las estancias clave. Puedes hacerlo cambiando algún mueble, las ventanas o los electrodomésticos. Verás como, por ejemplo, el baño o la cocina ganan mucho con una mínima inversión. 
 
Para evitar grandes gastos, prueba a cambiar la cortina de la ducha, el espejo o sustituir la bañera por una apráctica ducha. Y, para gustar a los más sibaritas, cambiando la nevera o con un vinilo conseguirás modernizar las paredes y le darás una nueva vida a la cocina ¡saldrás ganando!
 
Otro de los aspectos primordiales a la hora de mejorar un inmueble es aumentar su eficiencia. Por lo tanto, siempre que se pueda es importante apostar por instalar sistemas de energía renovable o mejorar el aislamiento de la vivienda que permitan, a medio y largo plazo, ahorrar en las facturas. 
 
Aquí déjate ayudar por la domótica y es que el futuro pasa por vivir en casas inteligentes. La domótica está a la orden del día y ya puedes, por ejemplo, controlar la temperatura de casa o saber qué necesitas comprar para llenar la nevera sin levantarte del sofá.

El tercer gran tip es ganar amplitud y luminosidad en casa. Para ampliar estancias o espacios diáfanos, sin necesidad de grandes obras ni quebraderos de cabeza, puedes optar por tirar o construir tabiques e, incluso, por una nueva distribución de los muebles que de sensación de mayor amplitud. 
 
La luz, por otro lado, es un punto a favor de cualquier vivienda. Los balcones cuidados, las plantas, los patios amplios y las estancias con muchas horas de luz natural convencen a casi todo el mundo, y más aún después de la pandemia. 
 
Además, importante: haz que tu vivienda sea accesible. El edificio con ascensor siempre gana puntos, pero además también revaloriza -y mucho- tener accesible el interior de casa. Por ejemplo, ampliando el espacio del pasillo para que queda una silla de ruedas.