Cuando se trata de comprar una vivienda, una de las figuras más comunes en el proceso de negociación es el contrato de arras. Este documento, necesario en algunas operaciones inmobiliarias, no solo sirve como garantía para ambas partes involucradas en la transacción, sino que también establece un compromiso firme de compra-venta. Sin embargo, una de las preguntas más frecuentes de los compradores es: ¿cuánto dinero necesito para un contrato de arras?

Antes de profundizar en las cifras, es esencial entender qué son las arras. Se trata de un acuerdo previo a la compraventa donde el comprador entrega al vendedor una cantidad de dinero en concepto de señal. Este importe demuestra la seriedad y el compromiso del comprador con la transacción, es decir, establece una relación contractual entre ambas partes, comprador y vendedor.

En España, existen principalmente tres tipos de arras: confirmatorias, penales y de desistimiento, cada una con sus propias características y consecuencias.
 

• Arras confirmatorias son parte del precio total de la vivienda y refuerzan el compromiso de las partes de llevar a cabo la venta. 
• Arras penales, por otro lado, permiten rescindir el contrato, perdiendo el comprador el dinero entregado o teniendo que devolver el vendedor el doble, en caso de ser él quien desista. 
• Arras de desistimiento, introducidas por la Ley 4/2013, permiten a cualquiera de las partes renunciar al acuerdo, perdiendo el comprador la señal o devolviendo el vendedor el doble de esta.

 

Generalmente, la cantidad de dinero que se entrega en concepto de arras oscila entre el 5% y el 10% del precio total de la oferta. Sin embargo, este porcentaje no es fijo y puede variar según el acuerdo entre las partes. Por ejemplo, si estás interesado en comprar una vivienda cuyo precio es de 200.000 euros, el importe de las arras podría situarse entre los 10.000 y los 20.000 euros. Este dinero se descontará del precio final en el momento de formalizar la compra-venta ante notario, siendo considerado entrega a cuenta.

Antes de firmar un contrato de arras, es crucial leer y entender todos los términos y condiciones. Asegúrate de que el documento refleje claramente el tipo de arras acordadas, la cantidad, el plazo para formalizar la compra-venta junto con el resto de las condiciones acordadas. Además, si es necesario resolver algunas dudas, es recomendable contar con el asesoramiento de un profesional inmobiliario o un abogado para evitar malentendidos o problemas futuros.